La palabra vino en la cultura china, como en la japonesa, hace referencia a cualquier bebida alcohólica, tanto fermentadas como licores, por lo que se suele acompañar con la referencia al origen (vino de arroz, vino de uva, etc.). Aunque el vino (vino de uva para los chinos) no es una bebida tradicional, contrariamente a lo que se pueda pensar en Occidente, el vino chino tiene una larga historia. La viticultura y la producción de vino en China empezó en la dinastía Han, en el siglo III. En los siglos VII a X, durante la dinastía Tang, la producción vitivinícola se expande, y se hace referencia al mismo en poemas chinos clásicos. En la dinastía Yuan, fundada por los invasores mongoles y que se dio en los siglos XIII y XIV, alcanza su máximo desarrollo, tanto en producción, calidad y cultura enológica.
Al final de la dinastía Qing, a principios del siglo XX, la industria enológica china se moderniza y empieza a abrir nuevas rutas comerciales. A finales de 1950, se realiza una plantación masiva de viñas en la región del Río Amarillo, abriéndose paralelamente una serie de bodegas y empezando una nueva época en la enología china. Actualmente, China es el sexto mayor productor de vino del mundo.
El rápido desarrollo de la industria del vino de China se atribuye a unas buenas condiciones para la viticultura. China posee un vasto territorio, con distintas condiciones ecológicas. En una latitud de 25 a 45 grados en una amplia zona geográfica, se dan condiciones para cultivar variedades de uva distintas y producir variados tipos de vinos. Incluso en condiciones climáticas tan extremas, como temperaturas tan bajas como 40 ºC bajo cero en el invierno en la zona de Tonghua y temperaturas en verano de hasta 45 ºC en el área de Turpan, se producen uvas de buena calidad. La variedad del terreno también es algo propicio para el cultivo de la uva, desde la meseta Yunnan, el borde de las zonas desérticas de Gansu Wuwei, la zona de Yinchuan, o la bahía de Bohai. Después de años de ensayos de cultivo, con la finalidad de ensayar variedades e introducir otras nuevas, tras el éxito de los mismos, se concluyó que China posee una gran cantidad de zonas aptas para el cultivo de la uva, con la posibilidad de cultivar diferentes variedades de uva para producir diversos vinos.
En China, las variedades de uva tinta representan el 79 % de la superficie y las variedades de uva blanca el 20 %. Con el fin de adaptarse al mercado internacional del vino, la industria del vino chino concede gran importancia a la introducción y promoción de variedades del mundo de uva fina de vinificación. Cabernet Sauvignon posee más de 23.000 hectáreas de superficie cultivada, siendo la más cultivada de las especies introducidas. Otras variedades de uva tintas introducidas son Merlot, Cabernet Franc, y Pinot Noir. China posee especies nativas de vid, como Vitis amurensis, muy resistente a las heladas, pero no a la sequía; por hibridación con las variedades europeas (Vitis vinifera), se producen varios cultivos resistentes a las bajas temperaturas. Las variedades de uva blanca cultivadas son la autóctona Longan (ojo de dragón) y las foráneas Riesling, Chardonnay, White Riesling y Trebbiano (también llamado Ugni blanc). Longan es una de las variedades chinas de uva de vinificación más antigua y famosa y la calidad de su vino es excelente, como lo demuestra el famoso vino blanco seco Gran Muralla de China.
China posee ciertas zonas con condiciones geográficas y climáticas apropiadas para el cultivo de la vid y la industria del vino chino, la mayor parte se hallan en la parte oriental y distribuidas de forma desigual. Las ocho grandes zonas productoras de vino son: zonas de la península de Shandong, Changli y zonas Huailai , zonas del noreste, zonas de Ningxia, Xinjiang, áreas Wuwei, zonas de Gansu y áreas del Suroeste, y áreas Qingxu. Estas ocho áreas principales se pueden dividir en tres regiones: oriental, central y occidental. En cada región, el vino tiene unas características propias que le hacen distinto.
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