Entre combatientes cristianos siempre se respetaron las treguas de Navidad hasta el siglo XX. En la noche del 24 de diciembre de 1914, en Ypres, Bélgica, en la Primera Guerra Mundial, las tropas alemanas empezaron a cantar villancicos, entre ellos Stille Nacht (Noche de Paz). Las tropas británicas respondieron cantando villancicos. Gritando, se felicitaron la Navidad, salieron de las trincheras, enterraron a los muertos y rezaron juntos.
La acción fue castigada en ambos bandos y a partir de entonces se hicieron fuertes bombardeos de artillería en Nochebuena para evitar que volviera a suceder algo similar.
La cadena británica Sainsbury conmemora este hecho, haciendo un tributo a los soldados de Gran Bretaña, en forma de anuncio navideño, llamado Sainsbury's Christmas Ad.
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