No puedo dejar de hablar del humo que nos vende el Sr. Rajoy con su rimbonbante reforma de las administraciones. Son gestos de cara a la galería. Muchos cambios para que nada cambie y a la Casta ni tocarla. Y si no, al tiempo.
Empresas públicas: unas son necesarias y cumplen bien su función y otras son una chorrada, coladero de amiguetes, enchufados, correveidiles y satélites varios. Pero ya se encargarán ellos de que a los amiguetes, enchufados, correveidiles y satélites varios no se les toque lo más mínimo.
Da igual PP, PSOE, IU, nacionalistas u otras siglas. Entre bomberos no se pisan la manguera.
Los que lo pagarán serán los 375.000 trabajadores que irán a la puta calle con los aplausos del respetable. Mientras la Casta seguirá como siempre, por encima de la plebe, del bien y el mal, e incluso de la Historia.
Desaparecerán organismos públicos. ¿No será qué se fusionan sus cúpulas dirigentes sin tocar un puesto de estos?
Desaparecerán concejales. La gente de los pueblos que lucha por mejorar la vida a sus vecinos sin cobrar un puto duro.
Desaparecerán coches oficiales. Dentro de poco veremos a la Guardia Civil en bicicleta.
No me creo nada, Sr. Rajoy, Vd. ha demostrado ser un mentiroso desde que llegó al poder. No se le ha visto un sólo gesto de nobleza, mientras que de servilismo ante la Casta y la Unión Europea y de desdén hacia los ciudadanos estamos más que cansados.
Si de entrada, machacó a los funcionarios, al pequeño comercio, a los autónomos, a las familias, a los discapacitados, a las clases bajas y medias, ¿para quién gobierna Vd.? ¿para los currantes, como afirma? o ¿para la UE, la banca y las grandes corporaciones?
¿Qué dice Vd. de los 445.000 políticos y 30.000 asesores, cuando en Alemania sólo hay 150.000 políticos? ¿a esos no les afecta?
Sr. Rajoy, no hay cojones para meterse con la Casta política, emulando a mi muy admirado escritor Javier Perez-Reverte. Pero desde luego sí que hay para ir contra la sanidad, la educación, los pensionistas, los funcionarios, el pequeño comercio, los discapacitados, etc.
Y ya para echarse a reír, por no llorar, son las declaraciones de la Vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría: ha llegado la hora del "sacrificio" de los políticos. ¿Sacrificio para los políticos? ¿van a perder como lo han hecho los trabajadores públicos y de la empresa privada un 30 % de sus salarios? Y teniendo en cuenta que estos son los privilegiados si conservan su puesto de trabajo. Porque ya ni hablo de los que han ido al paro, les han embargado la vivienda o se han arruinado sus negocios.
Deje de vender humo, junto con su gobierno, Sr. Rajoy que nos está atragantando porque no ha hecho otra cosa desde que ganó las elecciones.
Ojalá esté equivocado. Pero va a ser que no.
Jaime Arroyo
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