Sobre la polémica frase del preámbulo de "nación", el TC establece que carece de eficacia normativa. Jurídicamente esto es cierto, pero los preámbulos de cualquier ley deben tener cierto nivel porque captan el espíritu de la ley y serán analizados con posterioridad en el tiempo. Y el nivel fue de una enorme demagogia.
Anula también que el catalán sea la lengua preferente de la Administración; que el Síndic de Greuges (Defensor del Pueblo) supervise con carácter exclusivo la actividad de la Administración de la Generalitat; que el Consejo de Justicia de Cataluña sea el órgano de gobierno del poder judicial en Cataluña y actúe «como órgano desconcentrado» del CGPJ; que los actos del Consejo de Justicia de Cataluña sean recurribles en alzada ante el CGPJ, salvo que hayan sido dictados en el ejercicio de competencias de la Comunidad; y otros tantos recortes de derechos para los ciudadanos catalanes.
La reforma del Estatuto había sido creada por los políticos catalanes a su medida. Analizando el mismo en profundidad, son mucho mayores las desventajas para los catalanes que las ventajas.
Tan sólo un ejemplo, yo, ciudadano andaluz, he sido perjudicado por una actuación incorrecta de mi administración autonómica y tengo la posibilidad de acudir tanto al Defensor del Pueblo Andaluz, como al Defensor del Pueblo de España. En cambio, si soy catalán, sólo tendría posibilidad de acudir al Síndic de Greuges. Si esto no es un recorte de derechos que venga Dios y lo vea. Afortunadamente el Tribunal Constitucional ha purgado todos estos desatinados.
Ya hay voces nacionalistas (incluyendo el PSC) que llaman a la movilización. Afortunadamente, siempre hay justos en Sodoma y ni todos los políticos catalanes son nefastos, ni el pueblo catalán les sigue (sólo hay que ver la escasa participación en el referendum de aprobación del Estatuto).
Para acabar tan sólo dos apuntes. El primero, es que, a nuestro juicio, bastante más del Estatuto es inconstitucional, ya que vulnera la pretendida igualdad entre españoles. Y lo segundo, las inaceptables y vergonzosas presiones políticas que ha tenido el Tribunal Constitucional, impropias de un país democrático.
El seny, algo propio de la cultura catalana, significa sentido o cordura. Esperemos que al final sea el seny lo que se imponga y no el radicalismo.
JAM
EL FINAL DEL PROGRAMA DE FELIX MADERO SOBRE EL ESTATUTO DE CATALUÑA
ResponderEliminarhttp://www.puntoradio.com/popup/audio.php?id=45264#
Cuando hablan de la Patria –dice el poeta- mírense en el bolsillo de la chaqueta, porque igual no está la cartera. Y como los españoles, en general, somos aficionados en ponernos plomo en las alas, demasiadas veces, muchas veces, tantas veces.
ResponderEliminarPues me ha gustado.
Un saludo,
JAM