El suicidio de la izquierda en España

Si el gobierno más antisocial de Europa, a nivel nacional, es el de Mariano Rajoy, todavía le supera el de Artur Mas, que tiene de progresista, obrero y social lo que yo de cura, que mantiene que hospitales públicos catalanes cobren por dar habitación individual, recorta o suprime las pagas extraordinarias a los funcionarios, o aumentan los niños catalanes que pasan hambre, por poner algunos ejemplos.

Por eso, desde el punto de vista, ya no de la política, sino de la lógica, es difícil de entender que un sector de la izquierda apoye a Artur Mas en su referéndum sólo porque se enfrenta a España.

Se puede alegar que le apoya en su referéndum, pero no en sus políticas.

Pero ¿no es acaso una cortina de humo para desviar la atención de los problemas sociales, políticos y éticos de Cataluña? ¿cuando multitud de ciudadanos las están pasando canutas, que tienen ni comida que llevarse a la boca, el principal problema de Cataluña es el derecho a decidir?

¿No son catalanes los ciudadanos que sufren recortes en los hospitales catalanes? ¿no son catalanes los funcionarios a los que arrebatan sus pagas extraordinarias? ¿no son catalanes los niños que pasan hambre?

Y todo esto manteniendo multitud de enchufados en todo tipo de instituciones, tanto en la Península como en el extranjero, así como multitud de subvenciones a entes opacos y aduladores.

Para que no se tache con el discurso fácil de "españolista" o "imperialista", afirmo que, por ejemplo y sin ir más lejos, Castilla y León mantiene una juerga parecida. No llega a la orgía catalana, pero poco le falta. Y no por intención de sus políticos, sino porque no se pudo exprimir más la teta, cuando las cosas iban aparentemente bien (para los políticos, claro)

Se estén de acuerdo con sus ideas o no, merece la pena leer detalladamente el artículo de Lidia Falcón, ¿Dónde está la izquierda en Catalunya? Es un artículo hecho desde la experiencia y desde la racionalidad desde el punto de vista marxista, muy lejos de esta izquierda española tan rara, más preocupada por estar en buen rollito con los separatistas, que por los derechos de los trabajadores.

¿Qué interés tenía para los ideales de socialismo e igualdad de los trabajadores los planes económicos y sociales de la aristocracia catalana de 1714 que se aliaba con el más reaccionario de los pretendientes de la corona española?

De aquellos polvos vienen estos lodos. Preso el PSUC de la presión de los nacionalistas, que entonces eran un puñado de burgueses que conspiraban en Bruselas para que las condiciones de entrada en el Mercado Común les fueran favorables

Cuando los siglos pasen y los historiadores investiguen y recopilen los desdichados acontecimientos de más de medio siglo de historia española se asombrarán de cómo la izquierda se ha suicidado en España y especialmente en Catalunya. 

El engaño con que Artur Mas y compañía, los Pujol, los Millet, los Montull, los Maragall, los Serra, los Roca, –aquí también tenemos apellidos ligados al PSC– están arrastrando a los trabajadores en Catalunya a manifestarse en reclamación de una independencia que únicamente a ellos puede reportarles beneficios –y eso está todavía por ver– es tan patético que, en mi desánimo rayano en la desesperación, me pregunto: ¿Dónde está la izquierda en Catalunya?

A otro histórico de la izquierda que merece la pena escuchar es a Joaquín Leguina en La supervivencia del PSOE, que afirma que para regenerar a este partido es necesario:

 Olvidar la demagogia y buscar la racionalidad en las soluciones económicas (fiscalidad incluida) y sociales (la defensa de los servicios públicos y la persecución de los defraudadores, sean éstos ricos o pobres), propuestas todas ellas que lleven a la igualdad de oportunidades…

A algunos les sigue escandalizando la frase España una, grande y libre. ¿Por qué se escandalizan de esa frase? Quizá porque sea creación de Ramiro Ledesma. Entiendo que no comulguen con sus ideas. Puedo entender que no estén de acuerdo con la forma, pero deberían estarlo con el fondo.

Vamos a elucubrar un poco. ¿Alguien se imagina que en una entrevista al presidente francés Françoise Holland (del que está fuera de toda duda que es de izquierdas y progresista), alguien le preguntará: ¿no estará Vd. de acuerdo con qué Francia sea una, grande y libre? Si la pregunta -en Francia claro está- era algo tonta, la respuesta podría acabar en un exabrupto... La respuesta me imagino que podría ser algo así como Pourquoi me prenez-vous? Pensez-vous que je suis contre la grandeur de notre pays? (¿Por quien me toma? ¿se cree que estoy en contra de la grandeza del país?).

Y ahora va Cayo Lara y apoya a Artur Mas en su referéndum para gente sin problemas y burgueses satisfechos, sólo porque esté en contra de España. Y luego dirán que los españoles son "fascistas".

Cuando el drama del paro azota a las familias, cuando gobiernos sin escrúpulos recortan sus derechos sociales, cuando la desesperación hace que no se vea salida en la vida, las clases bajas y medias piensan que otra política es posible. Una política pensando en la gente y no inventándose problemas gente que no les tiene. Por eso no se siente representada por los que, en teoría, deberían representarles.

Atención pregunta: ¿Qué es más importante la salvaguarda de los derechos sociales de los trabajadores o la salvaguarda de los derechos de la casta política catalana?

A buen entendedor, pocas palabras bastan.

Jaime Arroyo

Compartir